Las gemas y piedras preciosas suelen sufrir diferentes manipulaciones destinadas a mejorar su calidad percibida. Conforme avanza la tecnología, validar la autenticidad de las gemas se vuelve más y más difícil, lo que genera una gran demanda de métodos eficientes y no destructivos para determinar la composición de piedras y metales preciosos.
Uno de los métodos más apropiados es la utilización de la espectroscopia de fluorescencia de rayos X dispersiva en energía (EDXRF), ya que se trata de una técnica rápida y sencilla que permite al usuario diferenciar una piedra verdadera de una falsa, o determinar si sufrió algún tipo de mejoramiento químico. Además de piedras, también permite analizar y cuantificar metales preciosos para identificar su grado de pureza.